Para tal evento ha conseguido reunir un jurado de verdadero lujo: si no los conocéis, bucead en sus blogs por que vais a quedar maravillados. Ellos son Bavette, Las Cosas de Cósima y Yolanda de Cocido de Sopa, vamos, todo un referente en este mundo de los blogs de cocina.
Eli y Conchi son Coulis de Limón. Las conozco desde hace poco, pero tienen un tirón enorme (sólo hay que ver la de recetas que han conseguido para el concurso).
La receta que os pongo es un plato que sirven en el restaurante "Vuelve Carolina", de Quique Dacosta. He ido varias veces y aunque todo me ha gustado mucho, este vasito se me quedó en mente y, lo he preparado alguna vez en casa y la verdad es que me queda bastante bien.
Se trata de una base de morcilla, un puré cremoso de patata, un huevo poché y un poco de panko tostado encima (como esta vez no me quedaba le puse cebolla crujiente, pero me gusta más cuando le pongo el panko o bien piñones asados).
INGREDIENTES para 4 vasitos
- 400 gr. de morcillas de cebolla
- 500 gr de patatas
- 25 gr. de mantequilla
- 125 ml de leche caliente
- sal
- 4 huevos
- panko (o bien laminas super finas de pan)
Sacamos las morcillas de la tripa y si no están muy triturados los trocitos de tocino, se trituran un poco más, se calientan bien sin nada de aceite (puedes hacerlo en el microondas). Una vez caliente se pone sobre un colador removiendo para que escurra el máximo de grasa.
Pelar las patatas para hacer un puré, lavarlas y si son gruesas cortarlas a trozos. Ponerlas en un cazo con agua fría en cantidad suficiente para que las cubra bien, añadir un poco de sal y hervir hasta que estén cocidas. Sacamos y escurrimos de agua.
En un bol pondremos la mantequilla a trocitos y sobre ésta vamos pasando con el pasapurés las patatas bien escurridas, para que te quede un puré bien fino. Revolvemos bien con una cuchara de madera para mezclar la mantequilla y vamos añadiendo la leche caliente poco a poco hasta que nos quede un puré cremoso.
Cubrir la base del vasito con la morcilla, sobre la morcilla pondremos un poco de puré de patata cremoso.
El siguiente paso es el huevo poché, que puedes hacerlo de dos formas:
- Dejar caer el huevo crudo encima del puré y poner los vasos en una olla vaporera (en el restaurante no se si lo harán en un horno de vapor a baja temperatura) aunque yo los hago en el varoma de la thermomix y me caben 4 vasitos.
- Hacerlos en un cazo con agua hirviendo de la siguiente manera: cortar un trozo de papel de film, pintarlo con unas gotas de aceite para que no se pegue después el huevo y meter el film dentro de una taza. Cascar el huevo y ponerlo en la taza sobre el film untado de aceite, añadir una pizquita de sal, coger las puntas del film y atar con un trocito de hilo o alambre de las bolsitas. Cuando los tengas todos preparados ponlos en un cazo con agua hirviendo, 5 minutos a fuego mínimo. Te tiene que quedar cuajado pero la yema blandita
Servir con un poco de panko tostado en el horno y si no tienes panko, puedes cortar rebanadas muy, muy finitas como si fueran escamas de pan, tostarlo en el horno y trocearlo o bien tostar unos piñones en una sartén sin nada de aceite hasta que los tengas doraditos.
Yo esta vez le he puesto cebolla crujiente pero no me ha gustado (prefiero el pan o los piñones).
Qué os parece este vasito copiado a mi manera de Quique Dacosta. Aunque a un Gran Cocinero es difícil copiarlo, este vasito en plan casero queda buenísimo.
Recordar que aún estamos de concurso hasta el próximo jueves 30 de octubre tenéis de tiempo