Esta confitura era muy típica en esta ciudad. Antiguamente, rara era la casa que en verano no se hacía, ahora es al contrario: se hace muy poco, pues cuesta bastante de hacer, es muy entretenido y ahora todos vamos siempre con prisas.
Todos los años la madre de mi amiga María hacía la confitura, y siempre me llegaba algún bote. Este año el padre de María recogió las prunas, pero su madre esta enferma, y mi amiga me dijo que las hiciésemos; yo nunca las había hecho, ni las había visto hacer y mi amiga nunca se había fijado.
Así que me fui a preguntarle a Matilde, la madre de un amigo de mi marido y ella fue la que me explicó minuciosamente como teníamos que hacer la confitura; y junto a los recuerdos de mi marido cuando era pequeño, recordando cuando su madre la elaboraba, nos atrevimos a prepararla.
INGREDIENTES
- 1 kg prunas
- 650 - 700 de azúcar
- cal (la venden en droguerías en pasta)
ELABORACIÓN
Estas son las prunas recién cogidas. Para que sea mas fácil pelarlas pinchar por abajo con un palillo.
Ahora las tienes que escaldar para pelarlas, poner agua a hervir, cuando rompe a hervir apagas el fuego y pones las prunas un minuto mas o menos y las sacas, y las metes inmediatamente en un bol con agua muy fría. Con mucha paciencia vas pelándolas con cuidado y las que tienen rabito intenta no quitárselo.
Ahora en un barreñito de plástico diluimos unas tres cucharadas soperas colmadas de cal en pasta, en cantidad suficiente de agua para cubrirlas, removemos muy bien para que se disuelva la cal, al cabo de un ratito verás que la cal se ha ido al fondo, ahora con mucho cuidado decanta ese agua a otro barreño e introduce las prunas, el tiempo es relativo comprobaréis que las prunas se hacen duras, según se van haciendo duras se van sacando y enjuagando muy bien para que desaparezca toda la cal.
En la cazuela dónde vamos a preparar la confitura, vamos poniendo las prunas y el azúcar (primero las pesamos) la cantidad va a gustos, mas o menos es por 1 kilo de pruna 650-700 gr. de azúcar, incluso hay quien pone menos azúcar y hay quien pone peso por peso.
Dejamos las prunas con el azúcar macerando, en la cazuela tapada unas horas veréis que el azúcar se deshace, antiguamente lo dejaban toda la noche.
Una vez el azúcar se ha disuelto, ponemos a cocer a fuego muy lento no tiene que hervir a borbotones ahora con las cocinas eléctricas se mantiene muy bien el hervor yo lo puse en inducción al 5 y cuando empezaba a hervir bajé la temp.al 3 y al 2, de vez en cuando removía con un vaivén.
Tiempo, todo el del mundo cuando empieces a ver un color bonito de caramelo ya estará, también puedes hacer la prueba de hebra floja, sacas con una cucharita un poquito del caldo deja enfriar un poco y pon sobre la yema del dedo índice una gota y con el pulgar juntas y separas despacito si se hace una hebrita ya está. Puedes dejar caer una gotita tibia en un vaso de agua fría, si al caer la gota sube una burbujita es que ya está la confitura echa.
Gurdar en botes de cristal y cubiertas con su caldito, por eso hay que hacerlo a poco fuego para que no se evapore, pués no es una confitura seca.
Nota: Siempre pongo limón a las confituras a esta no le he puesto pues me dijeron que antes no le ponían, también me decían que antes la elaboración la hacían en varios días pues la cocción la paraban dejaban enfriar y volvían a poner al fuego, tiene su explicación. He estado leyendo muchos procesos y muchas técnicas, pero hay tanto en internet que he estado varios días empapándome sobre estos procesos y sería imposible explicaros.
Se me olvidaba la fruta ha de estar dura, tirante, un poco verdosa si no no os quedará bien.